SEÚL - El campeón europeo Dani Sánchez derrotó al campeón mundial Dick Jaspers, luego venció en la final ante el coreano Myeong Jong Cha (50-16 en 16 entradas) y conquistó la Copa del Mundo en Seúl. El español de 48 años fue un brillante ganador con grandes partidos y altos promedios, luchando como un gladiador y con una sangre fría y talento reservados para los elegidos. Una pelea fantástica con Dick Jaspers en las semifinales y finalmente fue el único que pudo vencer al actor coreano Myeong Jong Cha frente a su propia afición. Sánchez logró así su 15ª Copa del Mundo en total, tercera en Corea, a la que le gusta llamar su segunda patria. Dani Sánchez fue un fenómeno y es un ídolo en Corea del Sur.
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El catalán Dani Sánchez tiene su propio centro de billar cerca del centro de Seúl, se ha hecho un nombre muy conocido con su marca DS Billiards, con la que también es patrocinador de muchos jugadores famosos, pero debe su fama principalmente a su extraordinario palmarés. Con sus victorias ante Torbjorn Blomdahl (50-30, cuartos de final) y Dick Jaspers (50-49, semifinal), el español volvió a demostrar en la Copa del Mundo en Seúl que es uno de los mejores billaristas del mundo. Sus comentarios tras la final le valieron un estruendoso aplauso. "Me siento feliz, aquí estoy en casa y he tenido que luchar mucho", confesó Sánchez en su discurso.
Dijo que ya había viajado a Corea más de dos semanas antes de la Copa del Mundo para prepararse de manera óptima. "He entrenado mucho, siempre quiero ganar, pero sobre todo en Corea. El nivel es alto desde los primeros días, nada es más difícil que ganar una Copa del Mundo en Corea". En su reacción posterior, recordó principalmente el partido contra Dick Jaspers: "Siempre es genial jugar contra Jaspers porque él es el mejor jugador del mundo. Tuve que luchar duro, estaba muy atrás, pero pude remontar. Y al final tuve un poco más de suerte'', mostró Sánchez su gran deportividad. También llama la atención cuánto respeto se tienen los dos campeones del mundo. Dick Jaspers comentó: "Dani juega muy fuerte y es el merecido ganador. Jugué mi mejor partido contra él, podría haber ganado si mi bola de partido no hubiera sido tan difícil. Miré y miré pero, desafortunadamente ya no tenía tiempo muerto y fue una verdadera pesadilla conseguir un tiro más eficaz. De todos modos, le deseo de todo corazón a Dani esta victoria mundialista. He perdido contra él varias veces en los últimos años y me alegro de haber podido jugarle un buen partido".
